Contexto Político
Por Efraín Flores Iglesias
A pesar de las limitaciones económicas y la retención de las prerrogativas a las que por ley tienen derecho recibir mes con mes, los 15 institutos políticos (7 nacionales y 8 con registro estatal) no se detienen en su intención de consolidarse rumbo a las elecciones de 2024.
El Partido de la Sustentabilidad Guerrerense (PSG), que dirige el abogado y economista Daniel Campos Caravallido, por ejemplo, cuenta con una buena aceptación en algunas regiones de la entidad. De hecho, es el partido con registro estatal que más ha crecido desde el pasado mes de julio a la fecha.
“Por un buen tiempo y una vida mejor para Guerrero”, es el lema que distingue al PSG.
Daniel Campos Caravallido ha sido respetuoso de la ley y las instituciones, y es un dirigente que no se queda callado ante las injusticias, mucho menos por la forma en que Morena dirige al país.
Y ése es el verdadero papel que debe jugar un verdadero dirigente de un partido político opositor. De lo contrario, sería comparsa del partido gobernante.
El dirigente estatal de PRI, Alejandro Bravo Abarca, por ejemplo, se ha distinguido por su papel gris y de estar alejado de las bases de su partido. Y se entiende. No se debe a esa militancia olvidada por décadas, sino a los caciques –sus patrones o jefazos– que lo impusieron en el cargo.
El PRI debería ser el principal opositor a Morena en Guerrero. Pero no es así.
¿Acuerdos inconfesables entre el anterior gobierno con el actual? “Piensa mal y acertarás”, reza un dicho popular.
El PSG, de acuerdo a su dirigente, es un instituto político diferente a los tradicionales, ya que su compromiso es con el pueblo, no con personajes que le han fallado a los guerrerenses.
El pasado 9 de agosto, Campos Caravallido señaló de manera puntual que “los partidos nacionales de todas las tendencias han fracasado en resolver mínimamente los más elementales problemas de la población como lo es la inseguridad, el desempleo, el deterioro del medio ambiente, la educación y la pobreza creciente de la vida del pueblo”.
Y ante la retención de las prerrogativas por parte del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana y la Secretaría de Finanzas y Administración del gobierno estatal, la representación del PSG ante el IEPC también ha alzado la voz.
“Morena no quiere elecciones ordenadas y democráticas pues no confía en que los ciudadanos le refrenden el apoyo otorgado en 2018, por eso quiere ahogar al Poder Judicial y por lo mismo debilitó al INE y ahora va por la extinción de los partidos, empezando por los estatales”.
Para Perla Martínez Hernández y Juan Morales Cirilo, secretaria general y secretario de Finanzas del PSG, respectivamente, Morena pretende extinguir al régimen democrático y republicano como lo ha dejado claro el presidente Andrés Manuel López Obrador, y prefieren un sistema de elecciones a mano alzada, ya que de esa forma será más fácil manipular a los ciudadanos.
Cabe destacar que el IEPC no ha ministrado desde el mes de mayo los recursos que por ley corresponde a los partidos políticos por concepto de prerrogativas, lo que pone en riesgo el proceso electoral que inició desde hace un mes.
El IEPC le echa la culpa a la Secretaría de Finanzas y Administración del gobierno del estado.
Lo cierto es que la retención de prerrogativas pone en condiciones de mayor desventaja en la competencia política-electoral a los partidos con registro estatal, ya que los partidos nacionales tienen financiamiento federal.
Lo importante es que el PSG no es un partido agachón ni satélite de la 4T. Y eso le ayudará bastante para ser un partido competitivo en los 80 municipios y 28 distritos locales en donde postulará candidatos.
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