Con retro excavadoras, camiones, y con palas, cerca de 20 trabajadores de la Coordinación de los Servicios Públicos Municipales, retiraron más de 40 toneladas de basura de un tiradero clandestino, ubicado a un costado del Puente Vehicular La Sabana II.
En ese sentido, al supervisar los trabajos, el titular del área, Juan Carlos Manrique García, dijo que atendiendo las peticiones ciudadanas se realizaban las labores de limpieza en ese lugar que es utilizado como basurero por vecinos, así como de la Testaruda y la Frontera.
El funcionario municipal afirmó que "la instrucción de la alcaldesa ha sido erradicar estos puntos de manera inmediata, y lo vamos hacer con los diferentes órdenes de gobierno, ella quiere seguir presentando un Acapulco limpio con una nueva imagen de Acapulco no solamente en el área turística, sino también en estos puntos alejados de la ciudad que nos contaminan ríos y arroyos".
Manrique García llamó a la población a no contratar los servicios de camionetas informales de basura, toda vez que los desechos no son arrojados en el relleno sanitario, sino en distintas zonas de la ciudad, generando puntos negros y afectando el medio ambiente.
Referente a los puntos negros, Juan Carlos Manrique dijo que hasta el momento han erradicado 16 puntos negros que se tenían detectados en La Marquesa, La Marquesita, Llano Largo, Tres Palos, La Bonfil, Puerto Marqués entre otros sitio, donde se realizan recorridos de manera conjunta con agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
Además del retiró de los desechos en ese lugar, el responsable de los servicios públicos en la ciudad, dijo que en esa zona también se efectuará la limpieza y deshierbe del cauce, con la finalidad de evitar desbordamientos durante la presente temporada de lluvias.
Por su parte, la directora de Saneamiento Básico, Otilia Hinojosa Loza, convocó a la población esperar el camión recolector y evitar focos de infección.
Asimismo lamentó que a pesar de que en algunas colonias se tiene establecido la frecuencia del camión recolector, “las personas se acostumbran a dejar sus residuos en algún determinado lugar y aunque pase la unidad recolectora de manera constante ni se fijan porque saben lo levantarán de donde lo tiren, hay mucha resistencia para poder esperar el camión a una hora determinada”.