Como parte de los operativos implementados por el Gobierno de Acapulco para evitar aglomeraciones durante la etapa más crítica de contagios por el COVID-19, este fin de semana se dispersaron a 713 personas que se encontraban reunidas en fiestas, tiendas de conveniencia, e incluso en la vía pública.
De acuerdo al reporte de la Coordinación de Protección Civil municipal, fueron retiradas 400 personas que celebraban una fiesta de XV años en el poblado de Las Plazuelas; de manera conjunta con elementos de La Marina, Guardia Nacional, Seguridad Pública, Fiscalía del Estado, así como las direcciones de Reglamentos y Espectáculos y Vía Pública, se les exhortó a tomar sana distancia y permanecer en sus hogares.
Mientras que, en el poblado de Cayaco también fueron dispersadas 200 personas reunidas en una boda, 11 personas más que se encontraban en una fiesta de cumpleaños, otras dos que consumían bebidas alcohólicas en la marisquería “Los Morritos, y 13 personas de este mismo poblado que convivían en una fiesta infantil.
En el poblado El Arenal fueron dispersadas 8 individuos que también consumían bebidas embriagantes afuera de la miscelánea con razón social “Chatito", así como a 30 personas aglomeradas en un novenario.
Sumado a estos operativos, se intervino además en la dispersión de 32 personas convocadas a una fiesta en la calle Roca Sola del fraccionamiento Condesa; a 11 personas en la "Casa Pampa" en el fraccionamiento Las Brisas, Guitarrón; en el mismo fraccionamiento en la "Casa Elsa" a otros 6 individuos, a quienes se les solicitó guardar la sana distancia.
El Gobierno Municipal refuerza los operativos para disminuir el número de contagios por COVID-19 y exhorta a la población a seguir las recomendaciones de mantener sana distancia, evitar aglomeraciones y mantenerse en casa.